Palafitos e iglesias de madera – la ruta arquitectónica del archipiélago de Chiloé

Viajar por en el archipiélago de Chiloé da la impresión de que el tiempo por aquí se ha detenido. La vida fluye sin prisas. También observamos que la madera es o fue el principal componente constructivo de la isla. Las Iglesias y los palafitos nos transportan por lo menos a unos 100 años atrás. ¡Te llevamos por el camino de la arquitectura del archipiélago de Chiloé!

¿Vamos?

Palafitos de Castro –auténticas postales

Los palafitos, construcciones de madera realizadas a orillas de la costa, colocadas sobre pilotes de madera de luma, muy resistentes a la humedad, son una auténtica postal de la isla de Chiloé y su rasgo más característico. Los palafitos surgieron por primera vez a finales del siglo XIX y fueron construidos por los agricultores y pescadores los cuales buscaban nuevas áreas de asentamiento. Para ellos, los bordes de la costa eran perfectos, las mareas altas permitían la pesca y los cultivos en temporada de marea baja. Las casas también tienen una salida hacia terreno sólido a través de un puente que se construía de madera.

* Luma (Amomyrtus luma) – árbol que se da en los bosques de Chile y Argentina. Debido a su fuerza, con ella se hacen mangos para herramientas, y hasta la famosa tonfa policial (llamada en Chile «luma») de los policías chilenos.

A pesar de que muchos palafitos ya han sido conectados a un sistema de alcantarillado municipal, existen todavía muchos palafitos que faltan por conectar o que bien, desechan agua del lavado de la ropa al agua de la bahía.

En la actualidad, un gran número de palafitos son de propiedad privada, desarrollándose sobre todo alojamientos y restaurantes. A diferencia de muchos palafitos casi en ruinas, los propietarios de dichos sitios se han hecho cargo de la renovación y modernización, manteniendo al mismo tiempo el carácter antiguo y los elementos arquitectónicos característicos. Un ejemplo es una cafeteria de arte – Palafito Patagonia. Aquí los propietarios te prepararán una buena taza de café, acompañado de deliciosas tartas caseras, lo mejor es que siempre estarán dispuestos a una interesante conversación para contarte la historia del lugar. ¡Te recomendamos totalmente que visites el lugar!

Las fachadas de los palafitos, coloridas, aunque en muchos casos ya maltrechas por el tiempo, crean un paisaje pintoresco. En otoño e invierno, la niebla de humo gris y espesa (debido al uso de chimeneas) cubre la ciudad de Castro. Se respira el típico olor a madera quemada. En nuestra opinión, por un lado una imagen encantadora y modesta, pero otra demuestra de vez en cuando la pobreza y despreocupación.

*Los Palafitos de Castro se pueden ver a lo largo de la calle Pedro Montt y Gamboa

La joya de madera – Iglesias de Chiloé

Las iglesias de Chiloé se comenzaron a construir en el siglo XVI cuando los jesuitas españoles llegaron al archipiélago. Para reforzar la misión de evangelización, se enviaron misioneros de Hungría y Babaría. De ahí los estilos constructivos europeos. Después de la expulsión de los Jesuitas en el siglo XVIII, llegaron los Franciscanos en su lugar. Ellos continuaron la construcción de las iglesias e iniciaron la tradición de la «escuela chilota de arquitectura religiosa en madera«. Hoy en día las iglesias que podemos encontrar tienen un estilo barroco y neoclásico. Estas son un ejemplo de la mezcla de la cultura local e influencia europea. Visitando el interior de las iglesias, podemos darnos cuenta del prolijo trabajo que se llevó a cabo, cuidando al máximo los detalles: interiores con tarugos en vez de clavos, cerraduras hechas de madera de luma, mañío. En el exterior, la fachada está cubierta por las emblemáticas tejuelas de luma, mañío, pellín, alerce o raulí.

De las 400 iglesias construidas durante el siglo XVIII y XX, hoy en dia quedan unas 60, de las cuales 16 fueron declaradas monumento histórico de Chile e incluídas en la lista UNESCO de patrimonio de la humanidad. Para potenciar el atractivo de estas iglesias, se creó la Ruta de las Iglesias de Chiloe. La más antigua es la «Santa María de Loreto» en Achao, en la comuna de Quinchao, cuya construcción data del año 1730.

*Fuera de la temporada alta, la mayoría de las iglesias están cerradas, por lo que solo durante misas podrás visitar su interior.

Casas de Chiloe: tejuelas y más tejuelas

Las casas de Chiloé son otro elemento característico. Al igual que las iglesias, las más antiguas se componen de la tan característica arquitectura chilota, influenciada por la arquitectura europea y realizada con maderas chilenas. La madera es o fue el elemento constructivo y decorativo clave. El exterior de las casas, al igual que los palafitos y las iglesias, están cubiertas con tejuelas de madera de Mañío, Luma, pellín, alerce o raulí. Sin embargo, si es necesario reemplazar alguno de estos elementos, debido a que hoy en día está prohibido cortar árboles nativos, se utilizan tejuelas de fibrocemento u otras maderas como el pino.

El alerce, especie protegida, era excelente como madera que resistía la humedad y las lluvias. Llevando esta especie casi a su extinción en la isla. Dentro de la casa, la cocina era el lugar más grande, punto de encuentro de toda la cocina. Podrás encontrar casas de muchos colores por la isla de Chiloé, ellas constituyen el típico paisaje de la isla.