Una mañana en el campo geotérmico más alto del mundo – Geiser del Tatio

Erupciones, fumarolas, baño termal en una fría mañana y sueños cumplidos… !Les llevaremos a los Geiser del Tatio!

¿Vamos?

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Hoy nos levantamos más temprano que ayer y esperamos con sueño a la camioneta a las 5am. ¡Qué sorpresa! El coche llega y, sin aún abrir las puertas, escuchamos a nuestros amigos brasileños de ayer.  Está oscuro y todos tenemos sueño, se nos recomienda dormir con el fin de aclimatarnos. A pesar de la fatiga, de alguna forma miramos el cielo estrellado, la cordillera delineada en la oscuridad y las numerosas curvas del camino no dejan pegar ojo. De vez en cuando, para evitar el mal de altura, bebemos lo que nos han recomendado ayer: té de chachacoma. Llegamos alrededor de las 6 de la mañana. El primer choque térmico que experimentamos sucede cuando nos bajamos del coche a comprar las entradas, probablemente hay alrededor de 0 °C. En el horizonte ya se ve una explosión de fumarolas. Tenemos aproximadamente unos 20 minutos para caminar por el trayecto designado. Literalmente estamos atrapados entre burbujas y fumarolas de agua hirviendo.

El Tatio tiene alrededor de 80 geisers, por lo que es el tercer campo geotérmico más grande en el mundo y, además, el más alto sobre el nivel del mar, unos 4300m. Para poder admirar el espectáculo en todo su esplendor de las fumarolas en explosión (a veces llegando hasta los 10 m de altura), hay que llegar allí antes de la salida del sol. Entonces, debido a la diferencia térmica del agua hirviendo y el frío ambiente, se producen las majestuosas fumarolas.

El Tatio, debe su nombre a la extinta legua atacameña kunza: «Tata-iu» o «Abuelo que llora», nombre otorgado por una leyenda local.

Los que tienen más frío pueden calentarse con un baño en la piscina termal. Solo existe el inconveniente de que debes cambiarte de ropa y colocarte el traje de baño a muy baja temperatura. Te aseguro que luego no querrás salir del agua. Si tomas un tour como nosotros, solo tendrás media hora para disfrutar.

Después del agua caliente y la altura, podrás sentirte como si caminaras en nubes. Luego de 5 minutos de caminata se te quitará. Entonces nos encontramos con los “verdaderos” géiseres. Podemos observar el proceso de erupción desde el principio. Se escucha como la cavidad del geiser se llena de agua, hasta que finalmente expulsa el agua hirviendo hacia el exterior. Todo es muy hermoso e increíble, pero hay que tener cuidado y no sobrepasar el camino delimitado, porque ya ha habido casos en los que algunos desafortunados turistas han muerto cayendo dentro de un geiser, o se han quemado.

Los Geiser del Tatio son uno de nuestros sueños por cumplir en nuestro viaje. ¿Quién habría pensado finalmente conoceríamos el lugar que aparece en esta foto, foto que obtuvimos hace un año atrás una tarde de otoño, durante una presentación de Chile que se llevó a cabo en un café de Cracovia?

Como siempre, para nosotros, el tiempo es muy corto… las horas vuelan en un entorno natural tan maravilloso. Observamos como el sol calienta más y la potencia de erupción de los geisers baja anunciándose así el fin del espectáculo. Es hora de despedirnos de este maravilloso entorno natural.

El viaje debe seguir, nos vamos a otro lugar. El siguiente punto en la ruta es el pueblo de Machuca, que consiste en no más de 20 casas de adobe situadas a lo largo de una calle arenosa. También puedes encontrar una iglesia de adobe de color blanco y puertas celestes, situada en lo alto de una colina. Fue el único edificio que sobrevivió al deslizamiento de tierra que tuvo lugar hace unos 25 años, y que destruyó el pueblo. EL mismo, fue reconstruido y gracias al auge turístico de Atacama, se convirtió en un paso obligado para los turistas que vienen desde los geisers.

Los residentes de Machuca, encuentran en el turismo una gran fuente de ingresos. Podrás ayudar a las abuelas que tejen con esmero sus suéteres de lana de alpaca o probar los famosos anticuchos de carne de llama o empanadas.

Para nosotros, fue la primera vez que probábamos los anticuchos. Lamento decirlo, pero la carne era bastante buena…

Nos vamos de Machuca, pero en el camino nos detenemos varias veces … foto a los flamencos …

la laguna…

las alpacas y vicuñas… el paisaje es hermoso. Finalmente, alrededor del mediodía estamos de vuelta en San Pedro.

Nota práctica:

Los Geisers del Tatio están situados a 95km de San Pedro de Atacama.

Viaje organizado al El Tatio: un buen precio es entre los 20-25.000 CLP. Además, debes pagar entradas al lugar:

-chilenos/extranjeros con RUT: 6.000CLP/persona

-extranjeros turistas – CLP 10.000/persona

Desde San Pedro debes salir muy temprano – sobre las 5 de la mañana y se vuelve en mediodia.

¿Llegar allí por tus propios medios?

Puedes intentarlo, pero levantarte muy temprano + aumento de altura + desconocimiento del camino y la oscuridad, no favorecen una conducción cómoda.

Consejos:

-Debido a la rápida subida de altura, se recomienda realizar el viaje a los geisers después de aclimatarte en San Pedro y, al menos, visitar otros lugares a menos altura.

– Si notas molestias debido a la altitud, toma medicamentos tales como píldoras contra el soroche, duerme bien y si te gustan las hierbas puedes preparar un té de Chachacoma (que ayuda a bajar la presión arterial)

– Vístete en capas, lleva un sombrero y guantes (las temperaturas de la mañana caen por debajo de °C) y lleva traje de baño si planeas bañarte en la piscina termal. Existen instalaciones para cambiarte la ropa pero no guardarropas.

Entonces, ¿quiénes de ustedes marcó El Tatio en la lista de sus sueños?